Descubre su talento

Mi esposo y yo decidimos que a los 7 años nuestra hija mayor iba a empezar a practicar un deporte simplemente porque nos pica la vena atlética.  Entendíamos que necesitaba un complemento adicional a la escuela, y más allá de darle la experiencia y oportunidad de desarrollarse, nos garantizaríamos alguna beca luego de cuarto año.  

Empezamos por ballet… como muchos. Luego buscamos un campamento de verano especializado en deportes para acelerar la exposición de ella a diferentes deportes. De esa manera, podríamos descubrir lo que le gusta y sus habilidades.  ¿Qué sacamos? Bueno como voleibolista, le llamaba más la atención gritar y brincar que darle a la bola. Disfrutó del karate, la gimnasia y la natación. Así que, lleva algo en la sangre convirtiendo estos deportes en varias opciones. En estas pruebas la vimos en una demostración de gimnasia rítmica, su cuerpo estilizado compaginaba con otras atletas y ver cómo se esforzaba fue suficiente para decir… vamos bien. Aunque hoy día no la practica encontramos que el baile, los show, los brincos y la gracia la ha ido definiendo en ciertos tipos de deportes como la natación artística y el cheerleading.

Todos los padres y creo que sería un por ciento bajo, entiende que su hijo o hija debe practicar un deporte de forma compulsoria. Somos nosotros los que guiamos la vida de nuestros hijos, por eso es importante sacar tiempo por etapas y llevarlos a experimentar experiencias fuera de su rutina escolar. Así, aprendemos a evaluar cómo reacciona a esa experiencia de acuerdo a su personalidad, lo que le gusta y lo que necesita para crecer en armonía y no obligarlos porque así lo queremos.

Al principio, en las edades de tres a cinco años con clases de una o dos veces por una hora en semana es suficiente. En esta etapa, muchas veces hacemos lo clásico de dividir actividades por sexo; las niñas ballet, gimnasia y los niños soccer, baloncesto, pelota o natación para ambos y eso está bien. Pero porque no experimentas también con otras disciplinas no necesariamente “deportivas” como el arte y la música que estimulen su imaginación, su creatividad, establecimiento de rutinas, generación de coordinación y motricidad, observar, interpretar, desarrollo del lenguaje, socialización, aprender sobre el mundo que les rodea, en fin ser felices. No debemos agobiarnos desde etapas tan tempranas, vamos a dedicarnos solo a estimular sus sentidos.

Cuando entramos en 6 a 9 años, ya vamos a una parte más física, pruebas competitivas y adquirir disciplina en un deporte individual. Conocemos bien sus estilos, mañas, carácter, genética, desempeño escolar y aprendizaje, problemas de salud, necesidades y talentos. En esta etapa la opinión de su hijo es sumamente importante para determinar el camino deportivo que le atrae y continuar experimentando el desarrollo de su coordinación motora, elasticidad y resistencia. Es la base para el desarrollo de sus capacidades no importa el deporte que finalmente decida. Las actividades recreativas alternas en menos intensidad (una vez o dos al mes), recuerda que nuestra intención es crear atletas para el futuro; y ellos están en constante crecimiento. Es el momento antes de entrar a tiempo completo a la competición descubrir nuevas técnicas y aprendan a controlar las emociones de nerviosismo, frustración o ansiedad como ejercicios de Yoga, Jiujitsu o Pilates; y liberar tensiones como el correr, nadar, escribir y dibujar. En esta etapa continúa la sensación de libertad pero acompañadas en momentos de responsabilidades como la escuela.

Desde los 9 años ya el niño puede definir y empezar más formal su entrenamiento. Pregúntale a tu hijo (a) ¿Te divierte practicar un solo deporte? ¿Estas dispuestos a dedicar todos los días largas horas? ¿Estás listo para competir? La madurez y su desarrollo físico será esencial para demostrar capacidad para iniciar la etapa de competición. La elección dependerá de su hijo 100% y de su apoyo 100% (no 50/50) en cada posición.

Empezar con deportes populares es una excelente forma luego vemos como las oportunidades aparecen y transforman todo. Observe sus habilidades y aptitud frente a las situaciones y cómo se desenvuelven. Pregúntate como padre: ¿son sus niveles de creatividad alto? ¿Es inquieto (a)? ¿Es coordinado (a)? ¿Cuán disciplinados (as) son? ¿Es exigente, atrevido, ágil? ¿Le gusta competir? ¿Se siente cómodo, seguro, es natural? ¿Le gusta trabajar solo? ¿Controla las emociones? ¿Experimenta y luego prueba?, ¿Es precavido? ¿Su cuerpo le permite desempeñarse? ¿Cómo es su etamina en ciertas actividades? ¿ Nivel de exigencia? Recuerda hay niños que su proceso de aprendizaje es más lento para determinar su potencial. Observa mi clasificación y descubre la opciones:

  • Acuáticos- Natación, Nado Sincronizado, Polo Acuático, Clavado, Agua Abiertas, Buceo, Canoa y Kayak, Remo, Vela, etc.

  • Terrestres- Atletismo, Triatlón, Pentalón, Ciclismo, Gimnasia, Gimnasia Rítmica, Patinaje, etc.

  • Combate- Balonmano, Esgrima, Bádminton, Hockey, Judo, Karate, Taekwondo, Tenis de mesa, Tenis de campo, etc.

  • Equipo- Baloncesto, Voleibol, Béisbol, Fútbol americano, Soccer, Pelota, Lacrosse, etc.

  • Extremos-Motora, Autos, patinetas, Surf, Kitesurfing, Mountain Bike, Freestyle, etc.

  • Destrezas- Equitación, Golf, Tiro, Tiro con arco, Bolos, Escopeta, Levantamiento de pesas, Ping Pong, Lanzamiento de jabalina, Lanzamiento de martillo, etc.

El trabajo de los padres es observar y dejar que se manifiesten sus intereses, inquietudes, afecciones, no le pongamos miedos desde pequeños… no piense que si usted no fue bueno su hijo tampoco o menosprecie las capacidades que puede tener…es un proceso que toma tiempo. No todos tienen que ser atletas, el deporte no solo necesita atletas también necesita administradores, entrenadores, organizadores, vendedores, psicólogos, nutricionistas, entrenadores personales, etc. No veas la educación de tus hijos como una tarea, al contrario míralo como una diversión en la que cumplimos con la sociedad proponiendo seres humanos útiles y competentes que llenan de orgullo nuestra sociedad. Si ama un deporte déjelo, su hijo aprenderá a tomar la decisión que necesita.  La experiencia que obtendrá en definitiva aportará para su desarrollo como estilo de vida saludable y productivo.

 

Zulyanille